Acudir al dentista de forma periódica es importante para nuestra salud, no solo bucodental, sino también general, puesto que muchas veces, las revisiones dentales rutinarias son fundamentales para evitar muchos tratamientos dentales más graves.
De hecho, seguramente te has hecho esta pregunta muchas veces, pero en este post queremos darte los motivos suficientes para que nunca más te lo cuestiones, simplemente, llames y pidas cita a tu dentista.
Los motivos principales
- Para prevenir. Si acudimos al odontólogo, como mínimo una vez al año, podremos proteger nuestras piezas dentales y garantizar la salud bucodental de una manera más eficaz. Estas visitas son rutinarias e indoloras, por norma general.
- Para evitar tratamientos más costosos y más invasivos. Porque con las revisiones podemos detectar a tiempo dolencias o patologías que a la larga pueden acarrear consecuencias más graves. De hecho, gran parte de las intervenciones que se llevan a cabo en las clínicas dentales se podrían haber obviado si el paciente hubiera seguido una rutina de visitas al odontólogo mucho más completa.
- Para ahorrar tiempo y dinero. Obviamente, los tratamientos dentales para solucionar problemas graves son mucho más específicos y concretos, por lo que resultan más caros que una simple revisión periódica. Las revisiones dentales son la clave para conseguir mantener una salud oral perfecta, pero también lo son para ahorrar dinero en intervenciones mucho más serias.
- Para evitar dolores innecesarios. Muchas personas sólo acuden al dentista cuando aparece el dolor, sin embargo, ese síntoma ya indica que es demasiado tarde. Si conseguimos anticiparnos a cualquier tipo de dolencia o problema bucodental estaremos ganando tiempo y de esta forma, nuestra sonrisa siempre estará sana.
- Por estética. Para conseguir una sonrisa sana, limpia, con dientes blancos y sin caries, es vital realizar revisiones periódicas. Y es que, estas revisiones generalmente vienen acompañadas de una “limpieza dental profesional”, con lo que conseguiremos unos dientes sanos, blancos y limpios por más tiempo. Una correcta higiene dental evitará problemas en nuestras encías, prevendremos las caries, el mal aliento y cuidaremos el buen aspecto de nuestra dentadura. Porque, no hay que olvidar que la placa bacteriana es la causante del sarro que ataca el esmalte de nuestros dientes provocando las caries. En una limpieza dental profesional se elimina tanto la placa como el sarro, consiguiendo una sonrisa perfecta y duradera.
En definitiva…
Visitar al dentista de forma periódica es uno de los gestos más sencillos y saludables que podemos hacer para garantizar nuestra salud bucodental. Para una persona sana, lo recomendable es acudir al dentista una vez al año, y dos, si desea una limpieza dental en profundidad. Para aquellos pacientes que tengan tendencia a inflamaciones en las encías o tratamientos que requieran varias visitas, recibirán del especialista la recomendación necesaria en cuanto al número de consultas a realizar, que seguramente serán más de una o dos anuales. Porque ya lo dicen, “más vale prevenir que curar”.